Itene abre la primera Oficina Huella de Carbono de España
El Instituto Tecnológico el Embalaje, Transporte y Logística de Valencia (Itene) acaba de anunciar la inauguración de la que denomina "la primera Oficina de Huella de Carbono que existe en España". El propósito de esa nueva entidad es "ayudar a las empresas a mejorar su perfil ambiental, tanto en lo que se refiere a sus actividades, como en lo relativo a sus productos".
Itene define su Oficina Huella de Carbono como un grupo de investigación cuyo objetivo es "mejorar el perfil ambiental de las actividades y productos de las empresas como vía para incrementar su competitividad". Así, y según el instituto, la oficina "podrá medir cuántos gases de efecto invernadero emite a la atmósfera, durante todo su ciclo de vida, cualquier producto o actividad de cualquier empresa y, sobre todo, podrá aconsejar a las compañías cómo pueden contaminar menos reduciendo su huella". El instituto ha presentado esta semana la Oficina como el fruto de los más de diez años que lleva "trabajando en la minimización del impacto ambiental asociado al envase y embalaje, el transporte y la logística".
Entre los servicios que oferta la oficina, estos son los principales: cálculo de huella de carbono de envases y embalajes, procesos de transporte y distribución de productos; identificación de puntos críticos susceptibles de mejora para la reducción de la huella de carbono; definición e implantación de medidas para la minimización de la huella de carbono; comparativas de huella de carbono de materiales, procesos de producción y logísticos o de reciclado; revisión crítica de estudios y cálculos de huella de carbono; desarrollo de indicadores legislativos y normativos vinculados a huella de carbono de productos y procesos de transporte; y actividades de formación en huella de carbono.
Según la directora de la Oficina de Huella de Carbono de Itene, Mercedes Hortal, "si no conocemos siquiera cuántas emisiones de gases de efecto invernadero (o su equivalente en CO2) producimos, difícilmente podremos saber cómo reducirlas". Por ello, para reducir una huella, lo primero que hay que hacer es medirla, según Hortal, que señala que esa medición, ese dato, permitirá a la empresa definir las estrategias más adecuadas y llevar a cabo las correspondientes acciones concretas de reducción de la huella.
Además –concluye Hortal–, "este análisis y las actuaciones posteriores permiten a su vez a la empresa optimizar sus recursos y procesos, siendo más eficientes desde un punto de vista global, y, por tanto, logrando un mayor beneficio no solo ambiental, sino también económico". Itene ya ha medido la huella de carbono de algunas empresas. Así, por ejemplo, cuantificó la huella de carbono de una bandeja para panadería de Consum. Según el instituto, este trabajo permitió a Consum "mejorar, entre otros aspectos, la gestión de los residuos y el impacto ambiental asociado a las anteriores bandejas que utilizaba".
La Oficina Huella de Carbono, que se encuentra ubicada en las dependencias que Itene dispone en el Parque Tecnológico de Paterna (Valencia) es "un proyecto cofinanciado por el Instituto de la Pequeña y Mediana Industria de la Generalitat Valenciana (Impiva) y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), dentro del Programa de Ayudas dirigidas a los institutos tecnológicos 2010, mediante el expediente IMDITE/2010/10.